¡¡¡El barco hacia aguas!!!

El capitán salió de su cabina para alentar a los marines
-Si aunamos esfuerzos iremos en la misma dirección
-Si apoyamos codo con codo podemos llegar a la orilla
Pero aquellos tripulantes habian dejado de creer en el compañerismo,
Habían perdido la ilusión en cada remada
Ellos buscaban nuevos destinos
Ellos deseaban intensamente borrar el viaje emprendido
El barco agonizaba lentamente en su propio mar de intolerancia, apatia y desilusión
Entonces el capitán les miró a los ojos y les dijo:
Cerrar los ojos
Pensad en todos aquellos instantes en que éramos una tripulación
Respirad hondo y escuchad el latido del compañero hasta que se funda con el vuestro
¿lo teneís?
Ese es el sonido de un equipo.
Cada cual llegaréis a tierra con distintos objetivos
Cada uno tenéis un motivo para remar
Pero si no lo haceis en la misma dirección
Os ahogaréis en vuestro propio egoismo
El esfuerzo es menor cuando se tiene apoyo
 
En aquel instante…el capitán saltó por la borda y nadó sólo hacia la orilla sin respetar el juramento que hizo de ser el último en abandonar el barco